La accesibilidad en una web se refiere a la facilidad con la que cualquier persona, independientemente de sus habilidades o discapacidades, puede acceder y utilizar el contenido y las funcionalidades de una página web. Esto incluye a personas con discapacidad visual, auditiva, motriz o cognitiva, así como a personas que utilizan dispositivos o tecnologías especiales para acceder a la web, como lectoras de pantalla o dispositivos de asistencia técnica.
Para conseguir una web accesible, es necesario seguir una serie de principios y buenas prácticas que garanticen que el contenido y las funcionalidades de la página web sean fácilmente comprensibles, navegables y utilizables para todos los usuarios. Algunas de estas buenas prácticas incluyen:
La accesibilidad en una web es importante porque garantiza que todos los usuarios puedan acceder y utilizar el contenido y las funcionalidades de la página web de manera igualitaria. Además, una web accesible puede ser más atractiva para los usuarios y mejorar la experiencia de usuario en general.
En la Unión Europea, la accesibilidad en las páginas web es una obligación legal en algunos casos concretos. La Directiva de la Unión Europea sobre el derecho al acceso de las personas con discapacidad y de las personas mayores a los servicios de la sociedad de la información (Directiva (UE) 2016/2102) establece que las páginas web y aplicaciones móviles de las administraciones públicas y de las empresas que prestan servicios públicos esenciales deben cumplir con ciertos requisitos de accesibilidad.
Estos requisitos se aplican a todas las páginas web y aplicaciones móviles que se hayan creado o renovado a partir del 23 de septiembre de 2018 y deben cumplir con el estándar de accesibilidad Web Content Accessibility Guidelines (WCAG) 2.1 a nivel AA.
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